oraciones, devociones, culto al sagrado corazon de jesus, por laureano benitez

«Tened fija la mirada en el Sagrado Corazón de Jesús, Rey y centro de todos los corazones. Aprended de Él las grandes lecciones de amor, bondad, sacrificio y piedad, porque esta devoción, responde más que nunca a las aspiraciones de nuestro tiempo Sobre las ruinas acumuladas por el odio y la violencia, edificar la civilización del amor tan deseada, el reino del Corazón de Cristo». (Juan Pablo II)

A lo largo de dos milenios, la Iglesia ha aportado a la humanidad un riquísimo patrimonio espiritual y cultural, que ha contribuido decisivamente a mantener incólume la Iglesia como una instancia de poder evangelizador y santificador que ha cambiado el mundo, y que asimismo ha conformado los cimientos de la civilización occidental.

Un componente fundamental de ese patrimonio ha sido la elaboración y trasmisión de un conjunto de devociones que, junto con la liturgia y la vida sacramental, ha proporcionado a los creyentes de todo tiempo unas prácticas eficaces para acceder a la vía mística, a la cual todos estamos llamados para alcanzar la santidad.

Dentro de esta tradición devocional ha ocupado un lugar preeminente el culto al Sagrado Corazón de Jesús, aunque su implementación ―desde fines del siglo XVII― fuera relativamente reciente. Sin embargo, la gran potencia santificadora de esta devoción le ha otorgado un papel relevante en los tiempos modernos, pues gran parte de sus características y contenidos le han sido suministrados a la Iglesia a través de una serie de revelaciones del mismo Jesucristo.

Plenamente inserta en el Magisterio y la Tradición de la Iglesia, la devoción al Sagrado Corazón es una de las que mejor expresa y recoge esa corriente de espiritualidad que ha producido extraordinarios frutos de santidad y espiritualidad en la historia de la Iglesia.

Es de destacar que en la institucionalización de esta devoción España ha jugado un papel muy importante, hasta el punto de que se puede decir sin temor a equivocarse que España, además de ser «Tierra de María», también es «Tierra del Sagrado Corazón de Jesús».

A este hecho contribuyó con especial relevancia la figura importantísima de Bernardo de Hoyos, presbítero jesuita, el primer y principal apóstol en España de la devoción al Sagrado Corazón, y de una importancia tal, que muchos le consideran a la altura de Margarita María de Alacoque, la figura más señera de esta devoción.

Beatificado el 18 abril 2010, en las revelaciones de que fue objeto por parte del Sagrado Corazón de Jesús es de resaltar que éste adjudica a España un papel muy importante en esta devoción. La más importante tuvo lugar el 14 de mayo de 1733, cuando recibió en el presbiterio del templo la llamada «Revelación de la Gran Promesa». Según escribió a su confesor y director espiritual, el Padre Juan de Loyola: «Dióseme a entender que no se me daban a gustar las riquezas de este Corazón para mí sólo, sino para que por mí las gustasen otros. Pedí a toda la Santísima Trinidad la consecución de nuestros deseos, y pidiendo esta fiesta en especialidad para España, en que ni aun memoria parece hay de ella, me dijo Jesús: “Reinaré en España, y con más veneración que en otras muchas partes”».

El hito más significativo de los tiempos recientes tuvo lugar el el 30 de mayo de 1919, cuando Alfonso XIII consagró España al Sagrado Corazón en el Cerro de los Ángeles (Getafe, Madrid)

Actualmente, después de un tiempo de cierta estancamiento, la devoción al Sagrado Corazón de Jesús experimenta un verdadero renacimiento, al que queremos contribuir en esta obra, donde pretendemos poner nuestro grano de arena para favorecer una mayor expansión de este culto. En primer lugar, reseñaremos una breve historia de esta devoción, para pasar después a la exposición de sus prácticas devocionales más significativas, y a una pequeña antología de textos sobre el Sagrado Corazón, escritos por aquellas figuras de la historia de la Iglesia que le prestaron especial atención, con el objetivo de que ayuden a enriquecer y potenciar la vida oracional dirigida al Corazón de Cristo.

Esta vida oracional es la que recogemos en la segunda parte del libro, donde presentamos una antología de las oraciones más importantes dirigidas al Sagrado Corazón pertenecientes a la tradición de la Iglesia, seleccionando especialmente aquellas que más favorecen la contemplación.

Ojalá esta obra cumpla con eficacia una de las promesas del Corazón de Jesús: «Otorgaré a aquellos que se ocupan de la salvación de las almas el don de mover los corazones más endurecidos».

Que así sea.

ÍNDICE

Obertura: En el camino de «La Gran Promesa»

Primera Parte: Misterium fidei

1: Alpha y Omega

· Historia de una devoción

· Espiritualidad, culto y devoción

· Prácticas devocionales

· Devociones

2: Textos sobre el Sagrado Corazón

Segunda Parte: Misterium amoris

1. Consagraciones

2. Adoraciones

3. Oraciones de petición por necesidades concretas

4. Oraciones de reparación

5.- Oraciones al Corazón Eucarístico

6. Letanías y salutaciones

7. Oraciones por España

Bibliografía